![Jorja Smith tocará por primera vez en la Argentina en el marco del Lollapalooza. Su show está programado para el domingo 31 a las 19.45](https://www.infobae.com/new-resizer/vOsSlr9T4kP5HLVHW8q4jJ_CJbE=/750x0/filters:quality(100)/s3.amazonaws.com/arc-wordpress-client-uploads/infobae-wp/wp-content/uploads/2019/03/26123332/Jorja-Smith1.jpg)
(Publicado en Infobae, 29 de marzo de 2019)
La cantante inglesa Jorja Smith tocará este domingo en el Lollapalooza Argentina. En la previa a su show, habló con Infobae
Cuando Perry Farrell ideó el primer Lollapalooza, en 1991, para despedir a su banda Jane’s Addiction, todavía faltaban seis años para que Jorja Smith naciera. A una orilla y otra del océano Atlántico pasaban cosas: mientras la «generación X» veía nacer en Chicago el festival que la definiría y el grunge terminaba de explotar desde Seattle, en Inglaterra el housepateó la puerta de la casa del rock para llevar a la música pop a otro nivel.
Mientras tanto, la casa de Peter Smith -en Walsall, a dos horas de Londres- olía a reggae y a soul: antes de que nacieran sus hijos Jorja y Luca era cantante de los extintos 2nd Naicha, que hoy no se consiguen ni en Spotify ni en YouTube. A su primogénita le inculcó el gusto por la música y la pequeña Jorja recogió el guante: comenzó a darle al piano a los ocho años, mientras que fue moldeando su gusto de acuerdo al emergente femenino de la época y clásicas. Desde Lauryn Hill hasta Amy Winehouse, pasando por Missy Elliott y la inmortal Nina Simone.
Todas ellas sonaban en los oídos de la Jorja adolescente que iba camino a su primer trabajo, de camarera en Starbucks, mientras soñaba, tal vez, continuar ese legado.
Fast-forward: Jorja Smith se convirtió en una cantante dulce y melancólica, una de las mejores noticias de la música negra de los últimos años. El soul, r&b y destellos de hip-hop conviven en su arte, con el que se ganó la confianza de artistas como Drake, Bruno Mars -abrió varios shows de su gira 2017- y Kali Uchis.
Después de haber utilizado plataformas como Soundcloud para dar a conocer su voz y editar el vital EP Project 11, en junio pasado lanzó su esperado y laureado primer álbum, «Lost & Found».
«Me siento muy afortunada de ser parte de un festival tan prestigioso. Es muy muy loco», le dijo a Infobae en la previa a su show en Lollapalooza Argentina. Tocará el domingo 31 en el escenario Alternative a las 19.45, jornada en la que también están programados Kendrick Lamar, Paulo Londra, Lenny Kravitz, La Mona Jiménez, Lali, Vicentico y muchos más.
-¿Cuánto influyó en tu música el hecho de que tu papá haya sido cantante?
-Bastante. Creo que es una combinación de eso y de crecer en un hogar donde la música siempre estaba sonando. Solía escribir canciones en mi habitación para después bajar las escaleras y tocárselas a mi papá. El me daba su punto de vista, hacía críticas constructivas que, en primera instancia, odiaba. Pero después la tenía en cuenta.
-¿Cómo te tomás la comparación que hacen con vos y artistas como Lauryn Hill, Missy Elliott, que digan que sos «la nueva Amy Winehouse» o que te señalen como continuadora del legado del soul?
-Es un privilegio que me vinculen con artistas como ellas, las admiro mucho. Pero son muy especiales y nadie puede ser como ellas. Por mi parte, estoy tratando de ser yo misma. Porque eso es todo lo que puedo ser. Por otro lado, creo que, a veces, un género, estilo, etiqueta puede ser restrictivo. Diría que mi música tiene un estilo distintivo y ese estilo vendría a ser yo.
-En la previa, tu disco «Lost & Found» generó muchas expectativas por tus singles previos y también por el trabajo con artistas como Drake y Kali Uchis. ¿Cómo manejás la expectativa ajena, te sentiste presionada?
-No lo pensé de esa manera, creo que habría sentido muchísima presión. Simplemente escribí las canciones que necesité sacar de adentro mío. Después, las puse todas juntas y armé «Lost & Found». En realidad, yo misma tengo altas expectativas sobre mi música y para satisfacerlas, tengo que trabajar.
-Tu disco lleva poco más de medio año de editado y te llevó a girar por gran parte del mundo. ¿Qué es lo mejor y lo peor de estar de gira y a qué lugares que todavía no llegaste te gustaría ir?
-Definitivamente, lo mejor es ver el mundo. Me siento afortunada de poder viajar con mi banda y equipo, que son literalmente como una familia. A veces puede ser demasiado y empiezo a extrañar mi casa o simplemente estoy cansada de tanto viajar. Pero es lo mejor, principalmente. Y me encantaría ir a tocar a África, Cuba, Jamaica y China.
-En tu disco subyace cierto contenido que retrata lateralmente el momento social de Europa, especialmente en letras como las de «Blue Lights». ¿Hacia dónde mirás cuando escribís?
-Generalmente, no miro hacia ningún lado ni busco inspiración externa cuando escribo mis letras. Tiendo a escribir sobre mis pensamientos o sentimientos. Siempre me encantó escribir poemas, así que pienso que eso se ve en mis letras.
-¿Qué música estás escuchando actualmente que te inspire?
-Depende del mood en el que esté. En este momento, amo la escena británica de jazz, realmente me inspira: hablo de artistas como Ezra Collective, Laura Misch, KOKOROKO.
-Alrededor del mundo, el feminismo se está fortaleciendo. ¿Qué creés que estás contribuyendo a la causa?
-Si soy capaz de inspirar a las mujeres a mi alrededor, siento que esa es mi contribución.