Beldent Random Fest: Pop para la generación shuffle

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(Publicado en el S!, Diario Clarín, 30 de septiembre de 2012)

Tan Biónica, Babasónicos, The Magic Numbers, Mystery Jets, Estelares y Poncho se mezclaron entre si para el Beldent Random Music Fest… ¡en la vuelta del Club Ciudad! Foto: Martín Bonetto

En donde normalmente hay un escenario (como mucho, dos), había cuatro. Y en vez de mangrullo para la consola de sonido, en el centro había un faro con una pantalla circular que determinaba dónde habría acción. El Beldent Random Music Fest lo hizo posible: después de casi tres años con las puertas cerradas para el rock (o el pop, el reggae… los festivales), el Club Ciudad de Buenos Aires fue el lugar elegido para el experimento. La lógica era la misma del modo shuffle (o random) de un reproductor de mp3, o casi. En el caso de este festival, su «memoria» venía llena de hits & hypes de los últimos 10 años, fiel reflejo de qué y cómo se consume música hoy por hoy. La luz blanca apuntó al escenario 2 y los Babasónicos abrieron el juego:Fiesta popularSin mi diablo y Pendejo. Luces afuera. Y caminar unos metros, esquivando gente, hasta el escenario de enfrente: Estelares y su Cristal, del último disco. Después, dos de los Magic Numbers y, luego, dos de los Mystery Jets (Someone PurerSerotonine). De nuevo a Estelares, Babasónicos otra vez y así…

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A todo esto, Tan Biónica seguía escondiéndose de los muchos y muchas que querían que, cuanto antes, estallara todo esto. En este momento de la historia, son los dueños de la histeria femenina y la hormona preadolescente, y cuando por fin les tocó su turno (preludiados con Seven Nation Army de los White Stripes, como acostumbran a abrir sus shows), quedó claro que era la banda que más esperada de la noche. La voz de Chano Moreno Carpentier se perdía entre los gritos de las chicas, que a su manera entonaron los versos de Arruinarse y Beautiful.

El otro grupo que no había tocado al momento era Poncho y calentaron la pista, de cara a la noche del sábado. Amortiguaron con baile y mashups (entre los tracks de su disco, mecharon riffs clásicos de rock de acá & allá, como Crua Chan y Sweet Child O’ Mine) la efervescencia generada por la banda anterior, que seguiría su set a continuación y ya se perfilaba para ser la banda del cierre (elegida por el público a través de sms o twitter, en el momento que se desarrollaba el festival). Antes de eso, Babasónicos tuvo dos tiros más (PutitaY qué?) y dejó todo listo para la arenga final de Chano y la ronda gigante que se abrió antes del estribillo de Ella, con Javier Zuker de invitado (mezcló en vivo). Tres horas y media después del comienzo, se puede afirmar que la movida se hizo «de chicle», pero que funcionó tal como fue prometido. Y si bien no faltaron grandes canciones, lo artístico sigue perdiendo terreno versus el formato.